top of page

6 abril 2025 (3): ¡Es la guerra!... Arancelaria

  • Foto del escritor: Javier Garcia
    Javier Garcia
  • 6 abr
  • 2 Min. de lectura

Ya sabéis que la principal noticia divulgada por la prensa en los últimos días no es la continuidad de la matanza de inocentes en cualquier lugar de este atribulado mundo, sino la carga impositiva que los Estados Unidos de América han determinado que deben pagar un sinnúmero de productos, procedentes de una igual larga lista de países, si quieren venderse en la tierra de las oportunidades.

Todo dio comienzo allá por la década de los setenta del siglo pasado cuando el pensamiento neoliberal empezó a controlar los gobiernos de los estados más poderosos del mundo. Entonces pareció buena idea deslocalizar la producción, a la búsqueda de las peores condiciones laborales. Ahora que los entonces esclavizados han mejorado la tecnología de sus antaño explotadores es el momento de invertir el rumbo y tratar de devolver las fábricas a sus domicilios originales.

El problema es que hay productos de imposible retorno, puesto que nunca estuvieron allí. Hablo, por ejemplo, de los lantánidos, de las máquinas herramientas, del buen vino o del incomparable aceite de oliva. Ellos se lo pierden y nosotros, tal vez, podremos comprar alguna de esas exquisiteces a precios más asequibles.

Dejando las bromas aparte, pienso, y ya lo he afirmado varias veces, que el capitalismo está reordenando los mercados porque cree que la globalización ha llegado demasiado lejos. El imperio así lo entiende, con la ventaja para sus intereses de que su principal bien de exportación, las armas, nunca están sujetas a aranceles de ninguna índole. No espero contestación adecuada alguna de esta medrosa y servil Europa, que aceptará cualquier humillación.

Lo tenemos bastante crudo. Sobrevendrá un periodo de ralentización económica que, me temo, aquí será especialmente notable, si además nos tenemos que gastar los menguados recursos que tenemos en la defensa, engordando, insisto, las cuentas de quienes nos excluyen de vender en sus mercados.

A los europeos jóvenes no les va a quedar otra que emigrar hacia la pujante Asia, como lo hicieron sus predecesores, pero en sentido opuesto, emulando a los que embarcaron con el propósito de atravesar el Atlántico y disfrutar de los recursos, aún vírgenes, del nuevo mundo. Ese que ha envejecido tanto que se tiene que reinventar, y lo hace con métodos excluyentes; mal asunto.

 
 
 

Entradas recientes

Ver todo
30 noviembre 2025 (2): El bazar en la red

Como hace tiempo que había dejado de prestar atención a las redes sociales, casi me había olvidado de la enorme capacidad de creación de negocio que fluye digitalizada. Es por eso que me ha pillado de

 
 
 
23 noviembre 2025 (3): Tsunami de despropósitos

El mismo día que el fiscal general del estado era insólitamente condenado por una filtración informativa, cuyo origen en la acusación pública no parecía evidente, salvo para el tribunal que lo juzgó,

 
 
 

1 comentario


Luis Fernandez Ovalle
06 abr

Se nos viene otro timo de la estampita. España (los empresarios españoles, para ser exacto) exporta a EEUU por valor de 18.000 millones de euros. El gobierno crea una línea de 14.000 millones para enjugar las pérdidas por incremento arancelario de un 20%, que serían sólo unos 3.600 millones... supongo que los otros 10.400 serán para comisionistas

Me gusta

Formulario de suscripción

688806378

©2020 por El observador inercial. Creada con Wix.com

bottom of page