14 julio 2024 (2): Malinche canta por soleares

Nacho Cano, el músico oficial de los gobernantes de Madrid, ha sido detenido e interrogado por la policía por una supuesta explotación de jóvenes latinoamericanos, seducidos por la posibilidad de hacerse con un espacio profesional en el espectáculo “Malinche”, que creó y dirije el antiguo miembro del grupo Mecano.

El suceso me permite hacer algunas reflexiones. La primera que me viene a la cabeza es que es hora de castigar el incumplimiento de la legislación laboral y de garantizar los derechos que la ley otorga a todos los trabajadores. Así que, si ese fuera el caso que nos ocupa, que deberá demostrarlo la correspondiente investigación, Nacho Cano habrá de enfrentar las responsabilidades que le correspondan. Pero, con independencia de Malinche y sus becarios, hay muchísimas otras empresas y hasta entidades públicas que no pagan el trabajo que se realiza para ellas, por lo que pido que se sea igualmente intolerante con todos los infractores y se defienda a los miles de jóvenes que viven del aire con la vana esperanza de que, pasado un tiempo, alguien se avenga a contratarlos debidamente.

La segunda reflexión que me hago es que son muchos los trabajadores extranjeros y, muy particularmente, latinoamericanos, los que vienen o se traen de estrangis a España para explotarlos ilegalmente, al tiempo que se les niega esos puestos de trabajo a los autóctonos.

La tercera involucra a la Comunidad de Madrid y a su presidenta, incapaces, la institución y la persona, de desvincularse de escándalos varios, con independencia del recorrido judicial de cada uno de ellos. Abuelos muriéndose en las residencias y padres, hermanos, parejas y hasta músicos de cámara de la presidenta poniéndola bajo sospecha no dicen mucho de la capacidad que esta señora tiene para lucir íntegra (no pongo en tela de juicio que lo sea, pero se esfuerza mucho para no parecerlo).

Y la cuarta y última va de la colonización de América. Rechazo la postura de bastantes latinoamericanos de meterse con los débiles, y denunciar el esclavismo y la destrucción cultural que practicaron en el continente portugueses y españoles, mientras callan las salvajadas perpetradas por ingleses y franceses. Pero, al tiempo, reconozco que todas las potencias europeas llevaron a la práctica políticas de exterminio y sojuzgaron a los pueblos indígenas y a los africanos llevados al Nuevo Mundo en calidad de esclavos. Por eso no trago el intento musical de “Malinche” de edulcorar el genocidio practicado por Cortés y sus hombres (guerra biológica incluida), tranformándolo en una suerte de dulce mestizaje, mutuamente consentido.